Bueeeno, les cuento que mañana emprendo mi retorno a mi ciudad natal. Ya pueden dejar de extrañarme.
En este momento estoy haciendo un test para saber a qué casa de Hogwarts iría. Me falla. Pero bueno, el primero que hice me dio Hufflepuff. Pero no, o sea, no. Hice otro y me dio Ravenclaw. ¿en qué quedamos? ¿soy Hufflepuff o Ravenclaw? Bueno, una tarde muy al pedo con mi primo y salió esto, ¿qué querés?
Decidí que lo mejor es dejar de hacer esto y hacer que mi primo escuche Nightwish. Hoy estuve todo el día cantando Bye Bye Beautiful con Carla. La desafinación por exelencia.
Que encima a Carla le está cambiando la voz y está más chillona que antes. Raro. ¿serán las hormonas?
No sé. Se quisieron colgar de las tetas de Zulma Lobato. Qué sé yo, Mariano se puso a cantar eso :|
Bueno, empiezo a tener miedo.
Justamente hablando de miedo, ¡No tengan miedo! Esta no va a ser la única entrada que haga con respecto a mis vacaciones. Tengo un montón de notas en el celular que son posteables. Entre ellas, una que habla de cuando mi viejo cerró la ventanilla del auto con mi pelo enganchado. Fue cómico. No sé si subirlo, me hace quedar mal. Y la gracia del blog es que yo quede como una viva bárbara. Voy fallando, evidentemente.
Porque mi blog consiste en hacerme quedar bien. Y la vida insiste en hacerme quedar mal. A ver, vida, ¿qué problema tenés? Soy grosa, lo sé y el resto del mundo lo sabe también. No intentes contradecirnos.
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